Mi casa

(Entré a casa despues de la misión, dejé la gema encima de la mesa. Era una gema bastante rara. Era de color fuego, entonces se me ocurrio una idea. ¿Y si lo miro a traves de la luz del fuego? Lo haré y lo hice. Entonces me quedé de piedra, no era una gema, si no un dragón. Un dragón bebé. ¿Que podia hacer con el? Me dije, que primero dormiria y despues por la mañana lo pensaria.

(Me desperté a la mañana siguiente, temprano. Pensé que todo habia sido un sueño, pero al bajarme de la cama me di cuenta de que no era así. Me dolia un poco la pierna. Entonces todo habia sido real y si todo habia sido real, lo que vi tambien lo era.) (Me acerqué al lado de la chimenea y vi que allí estaba, una gema preciosa en forma de huevo. Parecido al rubí, pero más brillante)

(Lo toqué y noté que desprendia calor, bastante calor)

(Noté que se movia, estaba vivo y por los movimientos tenia ganas de salir ¿por que no salia? espero que no saliera aquí, no tenia ganas de tener un dragón ahora. Cuando lo toqué note que desprendia un calor agradable y reconfortante. No creo que este dragón fuese malo. Así que lo dejé por ahora y salí de casa)

(Entré a casa, despues de la segunda misión. Cansado y con magulladuras. Pero nada me hizo olvidar mi combersación con la mujer elfa, estaba más decidido que nunca a liberar al dragón. Así que me dejé mis armas y me acerqué a el totalmente decidido)

-Es la hora pequeñín, yo seré tu jinete. Y tu serás mi dragón.

(Estiré la mano, muy nervioso. Pero algo me decia dentro de mi que tuviera confianza. Todo saldria bien. Así que sin dudarlo, lo toqué)

(Noté una fuerza increible al tocar el huevo y una descarga pasó por mi mano. Me la miré y tenia un óvalo con el signo del fuego en ella. Vi como el guepo daba golpes, ¿el dragón queria salir? yo no podia ayudarle, tenia que hacerlo el o ella solo o sola. Esperé a que saliera)

(Vi como era, era un dragón increible. De color rojo fuego, y bastante intimidante. Era un dragón asombroso. ¿Este era el dragón con el que yo estaba destinado? Pues si era así, me alegraba. Preferiria a este dragón que a ningún otro. Aceptaré mi destino)

-Hola pequeñín. ¿Te ayudo?

(No creo que me entendiera pero bueno. No pierdo nada por intentarlo)

-Hola, ¿me ves?¿me entiendes?

(Parece que no me entendia. Así que lo cogí y lo acaricie, para quitarle el resto de cascarón que tenia)

-Se que ahora no me entiendes, pero ya lo haras.

-¿PERO QUE HACES? No te comas eso, te puedes hacer daño.
(Se comio algunas brasas del fuego, parecia gustarle. ¿Era ese su alimento? Pues cientificamente hablando, las brasas solo son madera quemada a muy alta temperatura y combertiza casi en cenizas. Aun que si le gustaba mejor para mi, jejejeje. Me acerqué más a el para verle bien. Era precioso, me habia tocado el premio gordo con mi dragón, pero seguia con la incertidumbre de como seria de mayor)(Va bobadas. Me senté en un sillón delante del fuego y observaba como actuabamientras yo le hablaba haber si me entendia)

-Vale, veo que te gustan las brasas. No importa, mientras no te hagas daño me alegro.